sábado, 5 de octubre de 2013

OTRA OPORTUNIDAD.

Y al fin y al cabo la única persona a la que le tienes que dar oportunidades es a ti misma. Y así he hecho. Un lío de cosas que no quiero pararme a explicar, ya que no tienen explicación, me hizo de alguna manera enfermar mentalmente y querer algo que me iba a traer problemas muy gordos. La falta de autoestima, de infravaloración y los complejos me envuelven. ¿Por qué? Te preguntas. La respuesta es sencilla...no he valorado lo que tenía. No hablo de complejos en término físico, si no, de complejos a nivel de "¿por qué yo no puedo tener esa maravillosa personalidad que hace que la gente le quiera?" Sí que es verdad que me siento muy vacía y sí que es verdad que me he sentido muy desplazada. Ana y mía era un juego para mi. O yo un juego para ellas. Pero me aferraba a ello para parecer débil y así hacer que las personas me tomaran más en cuenta. Además que me hacía sentirme un poco más segura haciendo cosas inútiles. Y tras meses, meses y meses de una insoportable aunque soportable guerra he decidido parar. Parar y darme una oportunidad. Porque no me arrepiento de otras cosas pero si de esto. Siempre he tenido una voz en mi cabeza que dice "¿Por qué coño tienes que depender de un chico?" y otra que dice "Qué bien me sentiría si tuviera a alguien..." Y es uno de los dilemas que me han llevado a esa situación, que igualmente no se porque compartían la solución que yo le daba. Hoy es un nuevo día, y no quiero volver a lo de antes. Tal vez mi carácter haya cambiado, pero porque venía en mis genes, pero lo que si que ha cambiado es ese pensamiento de complejos y nevera.
-Valorar más lo que tengo.
-Que si digo que algo no me importa, no me importe de verdad.
-No recaer.
-Creer en mi.
-Concienciarme que solo tengo un par de amigos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta! Tu opinión me ayuda a seguir con el blog : )